domingo, 29 de enero de 2012

El club de la lucha.

La publicidad nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos. No hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seriamos millonarios, dioses del cine o estrellas del rock, pero no lo seremos y poco a poco nos hemos dado cuenta y estamos, muy, muy cabreados.

2 comentarios:

  1. Peliculón. David Fincher solo sabe hacer eso.
    Quizá te interese el libro, tiene que ser muy bueno.

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    1. La película la vi hace bastante tiempo, y me gustó mucho. Del libro no sabía nada, puede que me interese.

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